"Enseñando a los demás, aprendemos también nosotros" (Séneca)


La modificación de las culturas de trabajo de la enseñanza

 

Mi opinión sobre el artículo “La modificación de las culturas de trabajo de la enseñanza” de Andy Hargreaves, es que para que una enseñanza sea de calidad, las condiciones en las que se imparte deben de ser las adecuadas para conseguir el máximo rendimiento.

 La infraestructura y el material didáctico si son modernos y prácticos inciden muy positivamente tanto en la moral del maestro como en la del alumno y esto, repercute directamente en la calidad del aprendizaje. Si por el contrario las instalaciones del centro educativo son incómodas y los medios obsoletos, la moral es muy baja y el aprendizaje muy deficiente.

 El maestro, como cualquier otro buen profesional, tiene que estar al día en los cambios que frecuentemente experimentan las nuevas tecnologías y las materias a enseñar a los alumnos. Un maestro que no evolucione al mismo tiempo que los cambios educativos requieran, es nefasto para la calidad de la enseñanza y contribuye al deterioro que la sociedad pueda tener del concepto del educador.

 La cultura de trabajo de la enseñanza deber llegar a todos los niveles de la sociedad, por todos los medios disponibles, especialmente a través de los medios de comunicación, en los que con un lenguaje comprensible haga participar más activamente, y más a los padres en el proceso de aprendizaje, motivando igualmente a los maestros para que mejoren su preparación y poder combatir la falta de interés de la juventud por la educación.

 De las culturas de trabajo de los maestros, la más común es la del individualismo que ha perdurado a lo largo de los años, en la que el maestro se ha aislado en su clase y con sus alumnos y no ha colaborado con el resto de profesores en materias que unidos hubieran sido más eficaces para la calidad del aprendizaje.

 En los tiempos modernos, dada la flexibilidad, la capacidad de adaptación, la creatividad, la colaboración y el perfeccionamiento continuo que exige la cultura de trabajo de los maestros, la forma básica es la del mosaico móvil, siempre que se emplee en los aspectos positivos.